Soy una fan absoluta de Poppy. Disfruté como una enana viendo ‘Trolls’, y ni siquiera me llevé a mi sobrino para disimular. Y durante un mes, Justin Timberlake me cantaba en Spotify que «can’t stop this feeling».
Ahora llega ‘Trolls 2’ y era de esperar que hubiera campañas promocionales. No obstante, la de Oh My Cut!, la cadena de peluquería y estética, me ha divertido muchísimo, porque es una colaboración con Universal Pictures – aka papás de los Trolls – y porque te peinan como un troll.
Os cuento: la activación de la marca te anima a trollear tu estilo, y es que Oh My Cut! ha introducido el peinado trolítico en su portfolio de stylings, con lo que el 14 de marzo los peques de la casa podrán peinarse como la Princesa Poppy en el Kinépolis Ciudad de la Imagen y Kinépolus Diversia de Madrid (por cierto, Oh My Cut!, los mayores de la casa también queremos. Que a una también le apetece un cambio loco de estilo, no todo van a ser peinaditos pulidos a lo Anna Wintour).
‘Trolleando’ los cánones estéticos
Lo de Oh My Cut! mola desde hace tiempo. Su posicionamiento de marca, digo. Porque desde que empezó con Smart Beauty (Belleza inteligente), hemos visto cómo condenaba la desigualdad de la mujer en cuanto a salarios (en ‘La Hora de Cortar’), la presión por ser madres (‘Qué bien sienta un buen corte’) o cómo resaltaba su esperanza en un futuro mejor de la mano de las mujeres (‘The future is wow’, con tres mujeres fuertes, activas e independientes).
‘Qué bien sienta un buen corte’, el primer spot de Smart Bauty, consiguió 1 millón de reproducciones en Facebook en un sólo día, el de lanzamiento. Fue el 8 de marzo, y los comentarios no pudieron ser más positivos. Y lo de Trolls 2 va en esa línea: patada al 90-60-90 y todo lo demás. Que oye, y qué bien que me parece. Ojalá todas las marcas tiren por ahí, con esa autenticidad.
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